Test de Stroop: La atención y los procesos automáticos

El test de Stroop es una prueba psicológica usada para evaluar el control sobre las funciones psicológicas superiores en lo que se refiere a la atención, inhibición e interferencia.

Este test fue creado hace alrededor de 80 años por Jhon R. Stroop, quien en sus investigaciones descubrió que la lectura de palabras le toma a una persona un tiempo mayor que el necesario para reconocer colores.

Con lo anterior concluyó que eran procesos que si bien no son diferentes, requieren esfuerzos cognitivos distintos, de este modo estableció que dicha diferencia podría ser un factor medible para establecer el correcto funcionamiento de estas funciones cognitivas.

Todo lo que necesitas saber sobre el Test de Stroop

Ahora que ya sabes un poco de qué se trata este tipo de test, es momento de que profundicemos en conceptos que son vitales para comprenderlo a cabalidad.

La atención y los procesos automáticos

El test de Stroop tiene como foco principal de evaluación los procesos atencionales y la capacidad de modificar estos en relación a la tarea que deba realizar. Esto se debe a que muchos procesos que en principio requieren absoluta atención pasan con el tiempo a convertirse en procesos automáticos para los cuales no realizamos mayor esfuerzo cognitivo.

Entre estos procesos se encuentran los físicos como caminar, correr, montar bici, tocar instrumentos etc. En los procesos mentales por ejemplo, tenemos la lectura que es el foco real de este test.

En este sentido, en ocasiones nos cuesta un poco desembarazarnos de los procesos automáticos y volver a repensar la acción según la respuesta que se espera y no la respuesta automática que puede inducir al error.

Atención e inhibición

Lo anterior nos remite a los procesos de inhibición, en los que debes poner toda tu atención para modificar el comportamiento que automáticamente se desarrolla frente a ciertas acciones.

Por ejemplo, si le pides a alguien que ponga toda su atención en caminar, es probable que se sienta extraño o camine raro, esto se debe a que por medio de la atención inhibimos el comportamiento automático y tomamos el control cognitivo de la acción. Esto lo hacemos bastante sin darnos cuenta, cuando la tarea es un tanto más difícil. Algún caso concreto es aquel en que debemos correr o saltar un obstáculo que normalmente no saltamos.

Interferencia

La interferencia es otro de los conceptos clave para entender no solo el test de Stroop sino sus implicaciones clínicas y adaptativas.

La interferencia se refiere a la incapacidad de inhibir el comportamiento automático ante la tarea que se nos solicita. Es decir, como interfieren los procesos automáticos cuando se pide realizar una tarea con una respuesta distinta a la normalmente esperada. Esto lo entenderás mejor al avanzar en el análisis del test.

¿En qué consiste el test de Stroop?

El test de Stroop es la herramienta adecuada para medir los parámetros anteriormente mencionados y para establecer la capacidad inhibitoria en relación a la interferencia propia de los procesos automáticos frente a los focos atencionales.

Este test también es conocido como el test de palabras y colores, puesto que se basa en la lectura de nombres de colores en diferentes etapas, de este modo se trabaja la atención selectiva y el control inhibitorio, dando como resultado el nivel de interferencia propio de los procesos automáticos en cada sujeto.

El test tiene un tiempo de aplicación relativamente corto que no supera los 5 minutos, y se aplica en tres momentos o fases principales, dos de control y una de contraste como veremos a continuación.

Los tres momentos o fases del test de Stroop

Como mencionamos anteriormente el test cuenta con dos fases de control que son: lectura de palabras e identificación de colores, luego se genera un contraste a fin de lograr establecer el nivel de interferencia.

Lectura de palabras (Control)

La primera fase es bastante sencilla por ser una etapa de control, simplemente se proporciona al sujeto una breve lista de palabras escritas en negro con nombres de colores.

El sujeto debe realizar la lectura automática de cada uno de los nombres, en este punto se puede observar la habilidad lectora y tiempo de respuesta del sujeto.

Reconocimiento de colores (Control)

La segunda etapa de control del test de Stroop se trata de la identificación de colores, para ello se le presenta al sujeto una serie de figuras de distintos colores (Sin importar cuáles) y se le pide al sujeto que identifique el color de cada figura.

En este ejercicio se pone en evidencia la diferencia en los tiempos de respuesta y se verifica que el sujeto no tenga problemas para reconocer entre un color y otro, esto último sobre todo cuando el test se aplica a menores de edad o personas con bajo grado de escolarización.

Interferencia (Contraste)

Finalmente está la etapa de interferencia o fase de contraste, en este punto se le entrega al sujeto una lista de palabras con los nombres de los colores escritos en un color diferente al que representa, por ejemplo, la palabra blanco escrita en verde o la palabra rojo escrita en amarillo, pero esta vez no se le pide que lea la palabra, sino que diga cuál es el color en que está escrita.

Así, si la palabra blanco está escrita en verde la respuesta correcta es VERDE no blanco. De este modo es posible medir la interferencia generada por los estímulos con referencia a la tarea solicitada.

Análisis de resultados del test de Stroop

Los resultados del test de Stroop son realmente sencillos de analizar, principalmente por que se pueden colocar en función de aciertos y errores que se presenten en el transcurso de la prueba.

De este modo se pueden medir los efectos puntuales de interferencia generados por los diferentes estímulos, la capacidad de inhibición de procesos automáticos y la capacidad de adaptación de los sujetos a una situación nueva o con pequeñas diferencias con relación a las tareas que se realizan de manera cotidiana.

Aplicaciones del Test de Stroop

Este test tiene gran relevancia en el ámbito de la psicología clínica puesto que se ha podido establecer que ciertas patologías tienen una incidencia directa en la capacidad inhibitoria de un sujeto. Por ello el test resulta especialmente relevante en cuanto al diagnóstico de patologías derivadas de traumatismos craneoencefálicos, trastorno obsesivo compulsivo, TDAH, autismo y síndrome de Tourette.

Esperamos que este artículo haya resuelto tus dudas con relación al test de Stroop y que puedas usarlo en los ámbitos en que sea pertinente.

Karla Arango
Editora, correctora de estilo, investigadora literaria y poeta.