¿Qué es el modelo de desarrollo compartido?

El modelo de desarrollo compartido es un modelo macroeconómico implementado en el siglo XX por algunas naciones como respuesta a diferentes crisis financieras.

El caso más conocido y ejemplo más claro de implementación de dicho modelo se dio en México en la década de los 70s cuando el nuevo gabinete encabezado por el presidente Luis Echavarria propuso este como plan principal de gobierno bajo la premisa de solucionar las diferentes dificultades que atravesaba el país.

La implementación del modelo arrojó unos resultados muy diferentes a los esperados y se puede decir que empeoró más situaciones de las que pudo solucionar. Pero para que entiendas mejor el tema, presta atención a lo que sigue. 

Contexto del modelo de desarrollo compartido

Es importante entender que todo gobierno sin importar el país al que pertenezca debe por definición tener un plan que ayude al pleno desarrollo de la región y todos sus habitantes. 

En este sentido, el modelo de desarrollo compartido se configura como una especie de reforma interna que según la teoría, impulsará al país que la implemente en una carrera de crecimiento paralelo entre lo social y lo industrial, o dicho de otro modo, un crecimiento conjunto del sector privado y público.

En primera instancia, el modelo de desarrollo compartido contemplaba tres objetivos principales que según la teoría incluía a toda la población en conjunto, haciéndolos partícipes cada uno desde su esfera del plan de desarrollo del país: 

El primer parámetro del modelo de desarrollo compartido era la reducción del gasto, incluso si esto implicaba directamente la restricción del mismo. En teoría esto debía frenar la inflación y reducir puntos considerables en el déficit del país.

El segundo objetivo del modelo de desarrollo compartido era aumentar de manera considerable la participación del estado en las actividades comerciales del sector privado, esto a fin de poder influir en el mercado de manera directa regulando de cierto modo las reglas del juego del libre mercado,

Un tercer punto importante de la agenda propuesta por el desarrollo compartido tenía que ver con la participación del sector obrero en las diferentes dinámicas del sector productivo. Aquí es importante resaltar que, ninguno de los parámetros anteriores arrojó los resultados previstos, por lo que sufrieron un sinfín de modificaciones hasta al fin dar al traste con el modelo mismo.

Evolución del modelo de desarrollo compartido

Luego de su implementación en México, el modelo experimental de desarrollo compartido demostró su ineficacia para solucionar los problemas de dicho país. 

En primera instancia frenar el gasto en un país que se encuentra en déficit suena tarea sencilla, pero presenta dos problemas ineludibles. El primero y más notorio es que el gasto no se puede erradicar, por más que se procure un freno en este sentido, simplemente no puede darse. Y por otro lado, está la parte de la consecución de recursos.

En el caso de México, cubrieron el gasto a través de la emisión de moneda, lo que al fin de cuentas aumentó la inflación y fortaleció el monstruo al que se pretendía derrotar, el déficit lejos de desaparecer se elevó hasta las nubes. 

Una de las principales razones para ello fue que el gasto público, que ya aclaramos que es ineludible, se dejó de recaudar de las fuentes principales y que como el modelo de desarrollo compartido tenia una fuerte participación del sector obrero, esta recaudación no se desplazó a dicho sector lo que frenó considerablemente la recaudación de impuestos e impidió la creación de nuevos gravámenes.

Por otro lado, los intentos del Estado por permear el mercado resultaron infructuosos, no solo por la inexperiencia de los delegados estatales sino también por la inevitable ola de corrupción que creció alrededor de las actividades comerciales realizadas por los organismos del Estado.

Finalmente y como parte del modelo de desarrollo compartido se encontraba un programa de aprovechamiento de los suelos, en el que el estado tenía como visión incentivar al máximo la producción agrícola y ganadera. 

El problema de esto fue que el estado usó para la ejecución de dicho plan la figura de expropiación de tierras, lo que llenó de desconfianza no solo a los poseedores de tierras productivas sino también al inversionista extranjero, dejando al país en una posición sombría y solitaria en la que el capital empezó a solidificarse alrededor de rubros concretos y perdió gran parte de su liquidez. 

Consecuencias del modelo de desarrollo compartido

Pasado el tiempo, es posible considerar de primera intención las consecuencias del modelo de desarrollo compartido en función meramente de las métricas estadísticas que se obtuvieron para la época. Pero es importante tener en cuenta que muchas variables influyeron para que un modelo de por sí débil se convirtiera en la piedrecilla en el zapato para toda una generación. 

Durante la implementación del modelo de desarrollo compartido en México hubo un fuerte explosión demográfica, esto sumado a la reducción del gasto planteada por el modelo tuvo como consecuencia grandes poblados carentes de servicios básicos como el de salud o educación. 

La implementación del modelo en México tuvo como consecuencia un aumento exponencial no solo en el déficit y la inflación sino que también influyó para que el país tuviera uno de los mayores aumentos en la deuda externa de todos los tiempos. 

Lejos de incentivar la economía, el desarrollo compartido implicó un freno para una economía ya de por sí devastada. Además en el proceso de acoplamiento se invirtieron grandes cantidades en rescates financieros, este era uno de los objetivos del modelo, pero la respuesta del mercado no fue la mejor. 

Tiempo después se entendió que dichos rescates solo entorpecen el adecuado funcionamiento de los procesos capitalistas propios de toda empresa del sector privado. O dicho de otra manera, el intervencionismo solo encarece productos y servicios de baja calidad impidiendo el libre desarrollo de la competencia, pilar fundamental en el mundo de la macroeconomía. 

Es vital resaltar que el modelo también tuvo algunas consecuencias positivas, como la creación de fondos de vivienda y la implementación de recursos extra destinados al sector educativo.

No solo para la educación de niños y jóvenes, sino también de adultos y adultos mayores, además en el modelo de desarrollo compartido se visibilizan sectores indígenas y se crearon diferentes programas de alimentación con carácter social.

En términos generales esta es la información más relevante en torno al modelo de desarrollo compartido. Si quieres aprender más sobre temas económicos, te interesará leer: ¿Qué es la teoría del productor? Conceptos principales

Referencias bibliográficas

ARIADNA, M. F. C. DESARROLLO COMPARTIDO: COMPORTAMIENTO DEL MODELO.

de Sandi Valle, J., & Germán, A. Los desaciertos históricos de la políticas educativa y el» desarrollo compartido» de Luis Echeverría. Encrucijada, Revista Electrónica del Centro de Estudios en Administración Pública, (32), 1-23.

Rosa, M. J. A. DESARROLLO COMPARTIDO.

Karla Arango
Editora, correctora de estilo, investigadora literaria y poeta.