¿Qué significa ser una Mamá Luchona?

Crees saber en realidad ¿Qué significa ser una Mamá Luchona? «Mamá luchona» es un término que apareció aproximadamente desde el 2015 en redes sociales, y que ha sido el tema de miles de chistes y memes que causan la hilaridad general.

La expresión «Mamá Luchona» tiene una carga cultural y de significación social potente, y detrás de esta se encuentra un gran grado de ignorancia, falta de empatía y violencia contra la mujer.

¿Qué es una mamá luchona?

Según lo mostrado por internet, el término mamá luchona alude a aquellas madres solteras que no se dedican 100% al cuidado de sus hijos, sino que conservan muchas cosas de su estilo de vida antes de la maternidad, como salir de fiesta, tener amigos y dedicarse a otras actividades en las que no están involucradas sus hijos.

Leído así no suena tan grave, sin embargo, las burlas, memes y chistes que explotaron en las redes sociales en torno a las «mamás luchonas» son una muestra clara de discriminación frente a la mujer y a las formas diferentes de vivir la maternidad.

Evolución del término

La expresión «Mamá Luchona» nació en México, una país netamente patriarcal y con muchos rasgos machistas. Inicialmente se le asignaba a las madres solteras adolescentes. Posteriormente el término se fue extendiendo hasta todas aquellas mujeres que criaban a sus hijos solas, fueran divorciadas, jóvenes o mayores.

Este término se empezó a usar en oposición a «Mamá guerrera» que era la que se dedicaba 100% a sus hijos sin importar la edad que tuviera. La diferencia entre mamá luchona y mamá guerrera radicaba en que la mamá guerrera se dedicaba de lleno a sus hijos, mientras la mamá luchona exploraba otras facetas de su existencia.

Lo que se esconde detrás de la expresión «Mamá luchona»

Muchas personas se burlan de las mamás luchonas porque un sábado en la noche dejan a sus hijos con la abuela, tías o amigas para salir de fiesta, lo que nadie dice es que esta adolescente o mujer es madre soltera porque el padre de la criatura abandonó el rol paterno y a ella le tocó enfrentarse sola a todo el proceso de la maternidad.

Lo que se esconde detrás de la expresión luchona es entonces, el abandono masculino del rol paterno. Festejar chistes sobre «Mamás luchonas» es en consecuencia, ser cómplice de una problemática que no discrimina en edades.

Las madres solteras han existido en todas las épocas de la historia, y si esto sucede, es porque los padres que abandonan a sus hijos también son una constante, pero de esto nadie habla.

Del mismo modo los embarazos adolescentes son una problemática en todos los lugares del mundo, y tampoco es algo nuevo. Desde hace siglos existe maternidad adolescente, la diferencia radica en que antes lo hacían amparadas bajo la figura del matrimonio.

Basta tan solo con mirar las historias de las abuelas y bisabuelas, para comprender que la mayoría de ellas se casaban tiempo después de tener su primera menstruación, teniendo un promedio de 13 a 17 años, pues formar una familia después de los 20 años era algo que generaba desprestigio.

Adicional a lo anterior, es preciso tener en cuenta que el sexo es un tema tabú en cualquier época de la historia, incluida esta en la que se supone que tenemos mayor acceso a la información.

Las mamás luchonas desde una nueva perspectiva más empática

Es cierto que existen mamás luchonas, madres adolescentes solteras que se desentienden de sus hijos y que prefieren salir de fiesta y legar la responsabilidad a las abuelas u otras mujeres mayores.

No obstante, el hecho de que el embarazo adolescente siga siendo una problemática en el siglo XXI, tiene que ver con los sistemas educativas y formativos de las sociedades.

La idea no es desresponsabilizar a las madres adolescentes, no obstante, también es preciso resaltar que esta problemática le compete también a padres, amigos y al sistema educativo. Los niños y adolescentes son producto de las sociedades en las que crecen y por tanto no se puede juzgar de un modo radical a una menor que está influida por diversos factores culturales.

Las mamás luchonas en su mayoría no son mujeres que descuidan a sus hijos, son madres que viven la maternidad desde una perspectiva diferente, porque reconocen que para ser madres no tienen que abandonarse a sí mismas.

Muchas de las niñas que no pueden dedicarse de lleno a sus hijos es porque deben salir a trabajar o terminar sus estudios para poder brindarle una mejor calidad de vida a sus hijos.

Otros de los comportamientos por los que son juzgadas las mamás luchonas es por seguir con su vida de un modo normal. Por tener amigos, novio, por vestirse como gustan, por salir de fiesta o por hacer diversos proyectos de índole personal.

No obstante es apenas comprensible que en pleno siglo XXI las mujeres consideren la maternidad como una faceta normal de su vida que no interfiere con su desarrollo personal como mujer.

Una mamá luchona es entonces una madre soltera que es valiente y se atreve a desarrollar su personalidad con autonomía e individualidad.

Fuera de los casos en las que las madres se desentienden de sus hijos y ceden la crianza a otra figura materna, una madre soltera es una mujer capaz de sacar a sus hijos adelantes sin la figura de un padre que las apoye en los procesos de formación.

Ahora que ya sabes qué significa ser una mamá luchona, creo que de acá en adelante sabrás que no es sinónimo de burla o un chiste para difundir en las redes sociales.

Internet es un lugar muy poderoso por medio del cual transformamos conciencias, así que comparte este artículo con todos tus amigos para que derribemos prejuicios y todos sepan en realidad de qué se habla cuando se habla de una mamá luchona.

Karla Arango
Editora, correctora de estilo, investigadora literaria y poeta.