Reconectarnos con la Naturaleza es algo además de recomendable muy necesario para nuestra salud, ya no solo física sino mental.
Hemos cambiado la Naturaleza por un sinfín de artificios, que aparentemente nos ayudan y hacen felices, pero que a la larga nos convierten en seres infelices sin que nos demos cuenta.
El sonido de las olas del mar y del mecerse de los árboles se ha visto sustituido, en nuestra vida diaria y lo que es peor en nuestras noches, por el pasar de los coches por las carreteras. Ya es tan habitual que por suerte o por desgracia ni siquiera nos percatamos de ello.
Los árboles fueron sustituidos por verdes semáforos, antenas, torres de suministro de todo tipo y demás cachivaches, que nos saturan el horizonte.
El sonido de los pájaros ya no nos llama la atención entre el bullicio de las ciudades.
Todo el mundo corre de un lado a otro sin apenas ser consciente de ello, ni de por qué o para qué.
Y hemos llenado el planeta de trastos como un niño que se ha cansado de sus juguetes y los deja abandonados por los pasillos.
Ya no disfrutamos, de una noche tranquila de descanso, de un paseo por la naturaleza sin aparatos modernos, solo nosotros y una mochila, del cantar de un pájaro, del sonido del grillo en la noche, del mecerse de las hojas en los árboles y miles de cosas importantes más que sin querer hemos olvidado o apartado de nuestras vidas. Todo ello no solo repercute en nuestra salud física sino mental.
Ahora y solo por un momento imagínate en un bosque por el que baja un manantial de agua clara y fresca, que pudieses beber con solo agacharte a cogerla con tu mano. Después da un paseo mental a tu alrededor y fíjate en los árboles, en sus hojas, en ese pajarillo de colores que está en una rama y canta una hermosa y simple melodía que tu mente agradece al igual que el murmullo del agua que baja por el riachuelo.
¡Tómate tu tiempo y disfruta! Todo tu cuerpo está relajado y en paz, no necesita tensarse para defenderse, está en su medio natural. Caminas durante un rato en ese ambiente fresco y agradable y tras un árbol comienzas a divisar el mar. A lo lejos ves una playa desierta y tranquila donde las olas rompen suavemente. El sol acaricia tu piel con delicadeza al igual que la brisa del mar.
Ahora regresa a la realidad despacio y trata de recordar la sensación de bienestar que has sentido.
Tristemente este es solo un relato y a no ser que te vayas de vacaciones a algún paraíso idílico, de los que ya no abundan demasiado, no es fácil sentir esta sensación de Paz absoluta en la caótica civilización.
Así que cada vez que te sientas estresado recuerda que la naturaleza te da todo sin pedirte nada, porque eres parte de ella. Te da agua y aire limpios y puros, relajación física y mental, sanación para el cuerpo y la mente y es un bálsamo completo para el cuerpo, la mente y el espíritu, además de miles de cosas más, así que cuídala, respétala y protégela, pero sin interferir en su desarrollo natural, por que es lo mas maravilloso que nos ha dado Dios y nuestra Madre Tierra.
PUES SÍ!!! QUE GANAS DE PODER YA SALIR A LA CALLE Y A LA NATURALEZA ESPECIALMENTE
SALUD PARA TODOS
Lorena, mas de acuerdo no puedo estar. Estoy escribiendo un libro que se va a llamar «Addie’s Walk Through Nature», porque en estos ultimo años hemos retomado todo lo natural, orgánico y lo que habíamos dejado de lado y que es tan necesario.
Una pregunta, que opinas de los aceites esenciales?
Gostei! Muito bom! Parabéns!
Gracias Lysis!
No podría estar más de acuerdo. Por desgracia, la sociedad de hoy en día y el ritmo de vida que nos hemos marcado, nos ha llevado a estar más cerca del asfalto que de la naturaleza; olvidándonos de cuándo la necesitamos y de los tremendos beneficios que nos aporta. Como dices, tómate tu tiempo y disfruta. Nuestro cuerpo y mente lo merecen.
Lo merecen, claro que si.
cuidemos nuestra naturaleza y conservarla verde para respirar aire puro y ojala nunca nos la arrebate entre todos unámonos y protege mola
Cuidémosla mas.
A mi me encanta la naturaleza, aun así la saboreó menos de lo que quisiera. Pero si intento que mis hijos todos los veranos pasen 15 días en pleno campo (campamento scout), sin tv, sin móvil, sin electricidad,etc creo que son las mejores vacaciones que les podemos dar.
Es un gusto ver que aprecias la Naturaleza y te preocupas de que tus hijos también lo hagan.
Es cierto que son unas grandes vacaciones para ellos, que disfrutarán y recordarán toda la vida con cariño.
Un saludo.
Otimo texto. Parabens
Muchas gracias Marisa, me alegro de que sea de tu agrado.
Un saludo.