La inteligencia emocional es un concepto que, actualmente, parece estar posicionándose dentro de nuestra sociedad como un objetivo que poner en valor, al que todos deberíamos poder acceder y con el que gestionar la vida y las emociones se torna de manera más sencilla.
Sin embargo, a pesar de esta aproximación que ha tenido lugar durante la última década, lo cierto es que mucha gente todavía se sigue preguntando a día de hoy qué es la inteligencia emocional. Y es que a pesar de que se han realizado algunos esfuerzos por incluir la inteligencia emocional como una asignatura pendiente en escuelas y empresas, todavía no es una disciplina extendida al grueso de la sociedad.
Por todos estos motivos, en este post queremos ahondar un poco más en este tema, tratando de definirlo, de extraer algunas de sus principales aplicaciones y ventajas y, sobre todo, intentando incentivar a las personas para que empiecen a investigar esta temática tan productiva.
¿Qué es la inteligencia emocional?
Aspectos que se pueden trabajar con la inteligencia emocional
La inteligencia emocional es mucho más que una definición dentro del marco de la psicología actual. Existen algunos aspectos clave que definen a las personas que trabajan su inteligencia emocional y que, además, pueden servir como objetivos a cumplir por las personas que quieran empezar a practicar esta dinámica.
Autoconocimiento
El primer punto para trabajar la inteligencia emocional es el autoconocimiento, mediante el cual debemos ser capaces de vernos a nosotros mismos desde una visión ciertamente objetiva. Solo de esta manera seremos capaces de analizarnos, conocer cómo tendemos a reaccionar o, simplemente, dándonos tiempo para sopesar las ventajas e inconvenientes de tomar una decisión.
Resiliencia
La resiliencia es otra de las capacidades que se trabaja en la inteligencia emocional. Consiste en tener la capacidad de sobreponerse a situaciones difíciles, sabiendo que en todo existen puntos positivos y negativos. Esta capacidad nos ayuda a ser conscientes de lo bueno y lo malo que nos rodea, así como a saber enfocarnos en lo verdaderamente importante para continuar.
Gestión emocional
Otro de los puntos esenciales de la inteligencia emocional es la capacidad de gestionar nuestras emociones de forma óptima. Para esto, es necesario contar con un alto grado de autoconocimiento, que nos permita saber cómo tendemos a reaccionar ante ciertas situaciones. A partir de aquí, podemos ser mucho menos instintivos y gestionar nuestras emociones para extraer siempre la parte más positiva.
Empatía
Por último, otra de las partes más importantes de la inteligencia emocional es tener la capacidad de ponernos en el lugar del otro, sin menospreciarnos a nosotros mismos pero pudiendo empatizar con las emociones que afectan a las personas que nos rodean cada día.
¿En qué ámbitos se puede aplicar?
La principal aplicación de la inteligencia emocional se da, básicamente, en nuestra vida diaria. Nos ayuda a aprender a relacionarnos socialmente de una forma más óptima, más consciente y que, finalmente, nos beneficia.
En este sentido, la máxima aplicación que podemos notar en nuestra vida al empezar a practicar la inteligencia emocional es ver cómo mejoran nuestras relaciones humanas, desde las laborales hasta las más personales.
Otra de las aplicaciones más importantes de la inteligencia emocional es, sin duda, la de formar una base para el futuro laboral de los niños de hoy en día.
En Uruguay, por ejemplo, ya se ha implantado la inteligencia emocional como una enseñanza en la escuela, para que los niños cuenten con una formación que les ayude a hacer una óptima gestión de sus emociones.
Al mismo tiempo, los niños trabajan también en aptitudes de negociación, liderazgo, superación o toma de decisiones, entre otros conceptos esenciales para el desarrollo del futuro laboral de los más pequeños.
Sea como sea, lo que sí está claro es que la inteligencia emocional se puede aplicar a prácticamente todos los ámbitos de nuestra vida, convirtiéndose en uno de los ejes principales sobre los que se puede trabajar diariamente.
Es sumamente importante conocer el concepto, trabajarlo y poder aplicarlo dentro de cada persona para poder extraer los máximos beneficios y ayudarnos a vivir una vida plena, consciente y emocionalmente estable.