5 maneras efectivas para no comer en exceso

Imagina lo siguiente, estás en la boda de tu mejor amiga. Lo estás pasando genial. La comida está riquísima y has disfrutado mucho de la misma. Acabas de comerte tu porción del pastel cuando la mamá de la novia se acerca a ti con una enorme tajada de pastel y te dice:

-«Aquí una porción extra de este riquísimo pastel para la dama de honor de la boda de mi hija.»

Tú realmente quieres evitar comer en exceso, pero tampoco quieres ser grosera ¿Qué haces ante este dilema?

Cuando alguien nos pregunta si comemos en exceso. La respuesta de cajón es: «no». Aunque no lo creas las situaciones como la anterior se repiten muchas veces.

A continuación de pongo ejemplos cotidianos de comer en exceso:

  • Estás en una reunión de trabajo y una de tus compañeras pide bocadillos dulces para el café. Como ha pedido demasiados les dice a todos que quien quiera puede tomar varios bocadillos. Tú preferirías comer solo uno, pero ella insiste y te dice que todos se están comiendo más de uno y que las «dietas» no se hacen los viernes
  • Sales a comer con tus amigos y uno de ellos te pregunta si piden un postre extra para los dos. En realidad, tú ya no deseas comer más, pero lo están pasando tan bien, que cedes. Después ves como tu pantalón te empieza apretar más de la cuenta y te arrepientes de haberte comido esa porción extra de postre.

Estás en casa y tu hijo ya no quiere seguir comiendo. Ha dejado muy poco en su plato, por lo que te dices, bueno mejor me lo como.

Porque a ti no te gusta tirar la comida por convicción propia. Sin embargo, si te pones a pensar en cuántas pequeñas porciones de más te comes a la semana, créeme que te sorprenderías.

  • Otro típico ejemplo es cuando nos vamos de vacaciones. Es tiempo de relajarse y todo el mundo te empuja a comer en exceso. «Prueba esto, y ahora come esto. Estás de vacaciones, no pasa nada, después volverás a tu peso».
  • Si estás en un bufé en el que puedes comer de forma «ilimitada» sientes que tienes que comer mucho para justificar lo que has pagado. Y tus comensales también hacen lo mismo, pues todos quieren «sacarle el jugo» al bufé.

Lo cierto es que así es muy dificil poder llegar a tu peso ideal o mantenerte en él al largo plazo.

No obstante, hay 5 maneras efectivas para evitar comer en exceso sin tener que ser grosero o poco delicado.

5 claves para dejar de comer en exceso

Un poco de humor

Cuando alguien te ofrezca algo de comer cuando en realidad ya te sientes satisfecho siempre puedes hacer uso del humor. Si tú fueras la dama de honor del primer ejemplo, podrías responderle a la mamá de la novia de la siguiente manera:

«El pastel estaba sencillamente delicioso, ahora bien si me como una porción extra, mi vestido se me va a reventar y de verdad, qué pena salir en las fotos así.»

De esta manera, la otra persona no tendrá otra opción que reírse contigo y dejará de insistir. Por un lado, le has pintado una sonrisa en los labios y por otro has evitado comer en exceso.

Una observación inteligente

Otra manera para quedar bien contigo y con los demás es mostrándole tu puño a la otra persona y luego decirle:

«Sabías que el tamaño del estómago es del tamaño de este puño. Es increíble que queramos comer tanto cuando hay tan poco espacio, ¿no lo crees?»

Esta observación es real e invita a tu comensal a reflexionar sobre cantidad de comida que a diario ingerimos.

Tener claro los límites

Las personas «complacientes» o personas a las que les cuesta mucho decir que no, son presas fáciles de comer exceso. Aquí la estrategia es practicar en casa, frente a un espejo diversas maneras de decir: no.

Pero sobre todo, entender que si no marcas claramente tus límites, siempre habrá quien quiera sobrepasarlos. Incluso en el tema de la comida. Decir que no, no es ser grosero, es ser consciente de tus necesidades internas y ser coherente con las mismas.

Es muy importante estar conectado con tu propio cuerpo. Es decir, saber hasta dónde tienes que comer para experimentar placer y satisfacción, sin caer en excesos.

Cuando estés en un bufé recuerda que si estás allí, seguramente no será la última vez que vayas. Trata de sacar de ti el sentimiento de escasez. Siempre que quieras puedes volver, por tanto, no tienes que comer hasta que te sientas mareado.

Con respecto a las sobras de tus hijos, no tienes que tirarlas a la basura, pero mucho menos convertirte en el basurero de tus hijos. Siempre hay alternativas inteligentes para usarlas en otros platos.

No te dejes influenciar

¿Sabías que hay muchas personas que desean comer mucho más pero al ver que en su ambiente tal vez nadie les sigue el paso, empiezan a insistir para que otros coman?

En realidad, lo que hacen es proyectar sus deseos internos en otros. De esta manera, al otro comer con ellos, estos se sienten «justificados» para seguir comiendo. Aprende a distinguir quién está proyectándose en ti, y corta de un tirón la intención, comiendo solo hasta quedar satisfecho.

Cambia de tema

Otra estrategia que a mí me encanta, es el cambio rápido de tema. Imagina que estás en una fiesta y ya has comido suficiente. Llega la anfitriona y te dice que si quieres una porción extra de lasaña. En vez de decirle «no» a secas. Podrías decirle lo siguiente:

«La lasaña estuvo estupenda, la he disfrutado mucho. De hecho, te quería pedir la receta para hacerla en casa. Ahora mismo ya no me entra nada más en mi estómago. Pero es un plato que definitivamente, quiero volver a comer. ¿Cómo has preparado la salsa de tomate?»

De esta manera, tu anfitriona se sentirá muy halagada y en vez de insistir en que sigas comiendo, empezará a contarte cómo hacer la lasaña.

Resumiendo

Como ves tienes muchas opciones para escoger según sea la ocasión y la persona con quien estés tratando.

Evitar comer en exceso dentro de las actividades sociales es uno de los pilares de la alimentación consciente.

Somos seres sociales, estamos en constante interacción con los demás, por eso necesitamos estar preparados para cuando vamos a comer en grupo, responder a las demandas de los otros sin que esto interfiera con nuestro plan de alimentarnos de forma inteligente y saludable.

Wendy Madera
Apasionada de la conducta humana y del desarrollo personal.