Los precios del gas y el petróleo están subiendo sin parar a causa de la difícil situación geopolítica en la que se encuentra Europa. Incluso si no tienes una cocina a gas o no utilizas un coche para moverte, estos precios impactan en todo lo que haces, ya que buena parte de la electricidad que utilizamos se obtiene a partir del gas, y, sobre todo, los productos que adquirimos se transportan gracias al petróleo.
Europa ha tardado tanto en hacer una transición energética sostenible y ecológica que ahora se ve abocada a una situación muy difícil debido al chantaje de Rusia, con lo que debemos prepararnos para un invierno bastante duro. Como consumidores podemos hacer muy poco para bajar los precios del gas, la gasolina o el diésel, pero sí que podemos adaptarnos para que estos aumentos de precio no impacten excesivamente en nuestros hogares.
Estas son algunas de las medidas que puedes adoptar para pasar el invierno de la mejor manera posible, y sin enfrentarte a gastos excesivos:
1. Reduce al mínimo tu consumo energético
Seguramente verás muchos mensajes oficiales durante los próximos meses insistiendo en la necesidad de reducir tu consumo al mínimo, tanto de electricidad como de gasolina. Europa estará al límite de su capacidad durante este invierno, y, pese a que España no tiene ninguna dependencia del gas ruso, sí que deberá ceder parte de su gas para paliar las carencias de Alemania y otros países de Europa central y del Este.
Todas las medidas que puedas adoptar para reducir tu consumo eléctrico durante el invierno te serán de gran ayuda para pagar menos, pero, además, contribuirán a reducir el coste total de la electricidad en el país. Apagar regletas, reducir la calefacción al mínimo, instalar ventanas de doble aislamiento y evitar otros gastos innecesarios serán entonces medidas esenciales.
2. Ahorra todo lo que puedas en el supermercado
La canasta básica ha subido mucho de precio en los últimos meses, y probablemente subirá aún más durante el invierno, que es cuando se espera que el precio del combustible alcance máximos históricos. Por eso te conviene revisar el folleto Carrefour, el de LIDL y el de cualquier otro supermercado que tengas cerca para buscar los precios más competitivos en productos frescos o en artículos de limpieza y de higiene personal.
Comparar precios puede ayudarte a ahorrar cientos de euros en la compra, sobre todo si tienes que comprar comida para varias personas. Y el ahorro puede extenderse también a los productos de limpieza o de higiene personal.
3. Deja los viajes para otro momento
Si tienes que ir a ver a tu familia por Navidad, por supuesto podrás hacerlo, sobre todo si consideramos que durante la pandemia hubo muchas restricciones y se postpusieron muchos reencuentros. Pero los viajes que sean innecesarios deberían postponerse, ya que el precio del combustible estará por las nubes, y las aerolíneas o las compañías de autobús están trasladando esos precios a los usuarios.
Si necesitas viajar dentro de España, una buena opción puede ser el tren, que se mantiene dentro de precios razonables en algunas rutas. Son especialmente económicas las rutas que han sido liberalizadas y que han permitido la entrada de compañías como Ouigo, gracias a las cuales ahora puedes disfrutar de precios reducidos en trayectos como Madrid – Barcelona.
4. Reduce tus suscripciones de streaming
Quizá no nos demos cuenta, pero las suscripciones de streaming están subiendo mes tras mes, y se van comiendo nuestros ingresos de forma silenciosa, pero contundente. Amazon Prime fue la última en subir sus precios, algo que ya han hecho HBO y, por supuesto, Netflix, que prevé nuevos cambios para encarecer todavía más sus servicios.
Considera si realmente necesitas tantas suscripciones para disfrutar de tu ocio, y limítalas para no tener que gastar en exceso. Coordinarte con tus familiares para que cada quien pague una diferente también puede ser una buena opción.
5. Modifica tus hábitos de ocio
A todos nos gusta ir a restaurantes y disfrutar de una buena cena, pero el coste de este tipo de locales puede ser muy elevado en tiempos de crisis. No es necesario que renuncies a tu ocio, pero sí que puedes modificar tus hábitos para gastar menos. En lugar de ir a restaurantes, puedes disfrutar de tu ocio de otras formas, como por ejemplo ir de tapas o, simplemente, tomar una cerveza con tus amigos.
Para las reuniones de tipo más familiar, considera organizar cenas o meriendas al aire libre como alternativa en algunas ocasiones. De esta forma podrás ahorrar bastante dinero que podrás destinar para las cosas más importantes.