Preguntas abiertas: ¿Qué son y cuáles son sus características?

Las preguntas abiertas son aquellas que permiten a quien responde realizar la respuesta desde la argumentación, bien sea en sus propias palabras, o bien en cuanto a la teoría que se le está solicitando. Aunque en este segundo caso de cierto modo podemos decir que la persona responde con sus propias palabras, pero usando un lenguaje formal y sustentándose en la teoría.

Las preguntas abiertas son un método de evaluación que permite dar cuenta del conocimiento que se tiene de un tema, pero además, da cuenta del nivel de apropiación que tiene la persona en cuanto al tema que se está trabajando, sobre todo en el campo lingüístico y discursivo.

Metodología de las preguntas abiertas

Las preguntas abiertas siguen un método bastante sencillo, se le presenta al evaluado una pregunta puntual sobre un tema o temas, esta pregunta debe ser contestada de manera argumentativa por el sujeto que debe hacer gala del conocimiento que tiene al respecto.

Normalmente en este tipo de preguntas se le pide al evaluado ser conciso, es decir, tratar de no extenderse mucho en su respuesta, o, por otro lado, puede ser que se le pida a la persona que dé una respuesta amplia y plenamente argumentada, en este caso no importa qué tanto se extienda la persona.

Este parámetro de respuesta puede delimitarse también, entregando un espacio señalado para escribir la respuesta y especificando al evaluado que solo puede usar el espacio señalado en la prueba para las respuestas.

La metodología propia de las preguntas abiertas presenta, por un lado, la ventaja de ser pruebas que permiten al evaluador conocer de primera mano el nivel de apropiación que tiene un estudiante de cierto tema, además de observar habilidades relacionadas con el lenguaje tanto estructurado como técnico.

Por otro lado, al aplicar este tipo de preguntas, se tiene la relativa desventaja de necesitar una amplia cantidad de tiempo para la revisión de las respuestas. Esto, teniendo en cuenta que cada evaluado dará su propia respuesta en diferente lenguaje y diferente construcción de la respuesta, sin importar que la pregunta sea la misma.

Además, se puede enfrentar a verdaderos retos en cuanto a la caligrafía y ortografía que se puede encontrar en cada diferente respuesta.

En este sentido y en contraposición, las preguntas cerradas presentan la facilidad de tabular la información casi que automáticamente, gracias a los sistemas de hojas de respuestas. Además al ser respuestas únicas no entra el factor subjetivo de la interpretación presente en las preguntas abiertas.

Aplicación de las preguntas abiertas

Es necesario aclarar que las pruebas que usan preguntas abiertas suelen darse en ambientes académicos de evaluación de estudiantes, normalmente en los procesos de investigación se evita o se limita el uso de preguntas abiertas.

Lo anterior se debe a que, este tipo de pregunta en medio de un proceso investigativo puede aumentar considerablemente los tiempos de registro y análisis. Esto puede ser bastante inconveniente, si el tamaño de la muestra es muy grande puesto que deberían analizarse las respuestas de cada uno de ellos.

Por otro lado, tasar las respuestas subjetivas en un proceso de investigación suele ser bastante complejo, en investigación hay formas de hacerlo, pero resultan altamente desgastantes. Pero no estamos diciendo que sean buenas o malas las preguntas abiertas, solo que existen diferentes aplicaciones posibles y que algunas de ellas resultarán más productivas que otras. Por ejemplo, en la tasación de experiencias, las preguntas abiertas funcionan de maravilla.

Si usas preguntas abiertas en una encuesta de servicio por ejemplo, puedes conocer de primera mano la opinión y percepción de la gente en cuanto a tu local o empresa. Si lo piensas, sería bastante difícil llegar a ciertos aspectos o respuestas si simplemente le das una pregunta cerrada con solo algunas posibilidades de respuesta.

Aunque es importante destacar que la combinación entre los dos tipos de pregunta, es decir, entre preguntas abiertas y cerradas, puede resultar bastante beneficioso para clarificar respuestas o para abrir la posibilidad entre las respuestas dadas y alguna respuesta que se nos haya quedado por fuera.

Otra forma de combinar estos dos tipos de pregunta, es por ejemplo pedir que se describa un sistema mencionando por lo menos 3 de sus elementos (o más en el caso que sea más complejo) en este sentido por ejemplo podría preguntarse, “Describa el ojo mencionando por lo menos 3 de sus partes” de este modo la respuesta abierta puede mostrarnos el conocimiento general y la cerrada el puntual con respecto al tema y componentes del mismo.

Para lo anterior puedes por ejemplo realizar una pregunta con tres opciones de respuesta y en la cuarta incluir la opción “Otros” dejando un espacio en blanco para que la persona incluya en este las posibles respuestas que se hayan quedado por fuera al diseñar la prueba o encuesta.

Resumiendo

En resumen, las preguntas abiertas nos brindan una mayor amplitud de respuesta en la que se pueden evidenciar aspectos que tal vez ni siquiera se tenían previstos antes de realizar la encuesta y recibir las respuestas.

Por otro lado, puede resultar bastante dispendioso y desgastante el análisis y clasificación de las respuestas abiertas, y por otro lado si son respuestas a las que se les debe asignar un resultado o nota, puede resultar bastante subjetivo y difícil establecer claramente los criterios en algunos casos.

A pesar de esto, cada vez es más la utilización de las preguntas abiertas en contextos investigativos gracias al aporte amplio que puede brindar este tipo de respuesta al momento de realizar investigación etnográfica. Aunque en este sentido son muchos los que afirman que este tipo de procedimiento aleja un poco la investigación del marco contextual del método científico, puesto que quiérase o no, altera el proceso, introduciendo la subjetividad que posibilita las respuestas abiertas.

Ahora conoces qué son y cómo funcionan las preguntas abiertas tanto en ámbitos académicos como en investigación, además los pros y los contras señalados por los expertos respecto a las mismas.

Es posible crear todo tipo de preguntas abiertas, pero en todo caso trata de limitar el espacio o tiempo de respuesta para que no pierdas el norte del tiempo en el proceso y termines gastando más tiempo del necesario para establecer una respuesta o respuestas.

Karla Arango
Editora, correctora de estilo, investigadora literaria y poeta.