Las emociones y el sexo están más relacionados de lo que crees. Muchas veces los estados afectivos negativos terminan por afectar el rendimiento y la satisfacción sexual, afectando la relación con tu pareja.
¿Cómo las emociones afectan en el sexo?
Según el equipo de la unidad especializada en sexología de Centro Médico de Psicología, donde encontramos probablemente a los mejores psicólogos en Barcelona, las emociones siempre formarán parte de tu vida, por lo que son inevitables de sentir. Tampoco hay emociones buenas o malas, todas son necesarias y transmiten información importante.
Una de las áreas de tu vida donde influyen las emociones es en la sexual, estas provocan consecuencias negativas cuando no se gestionan de la manera correcta, perjudicando el rendimiento, el deseo y la satisfacción sexual.
Las emociones que más afectan la libido sexual es la tristeza, la depresión, el estrés, la ansiedad y la frustración. Todas son una carga emocional que es complicada de gestionar, sino se presta la debida importancia.
Cuando estas cargas emocionales están presentes en tu vida, sufres de trastorno en el deseo sexual, por lo que no tendrás ánimo de tener sexo. Sufrirás de problemas de erección y de eyaculación precoz, afectando la satisfacción sexual de ambos.
Como mujeres, los síntomas que presentarás por estas emociones es anorgasmia femenina, no alcanzarás el orgasmo a pesar de la amplia estimulación de tu pareja. La eyaculación es retardada y sentirás dolor pélvico durante la penetración.
Las cargas emocionales mal gestionadas afectarán tu vida sexual, tanto en lo psicológico como en lo físico, por lo que es un problema que debes atender de inmediato si quieres mejorar el ámbito sexual en la relación.
Además, una mala gestión de estas emociones provocará que no puedas comprender las emociones de tu pareja, esto trae implicaciones negativas al mantener relaciones sexuales, ya que el sexo es un acto de comunicación física y emocional.
¿Qué hacer en estos casos?
Irene Cabrera, sexóloga en Barcelona de Centro Médico de Psicólogía y directora de la unidad especializada en sexología explica que cuando las emociones afectan en el sexo, lo primero que debes hacer es aprender a gestionarlas, de esta manera, podrás evitar las alteraciones en tu vida sexual.
Lo primordial es mejorar la confianza con tu pareja, con una buena comunicación en el sexo y sobre los problemas de la vida diaria, sintiendo su apoyo y comprensión, evitarás que las cargas emocionales afecten el apetito sexual.
También debes aprender a manejar el estrés y la ansiedad, realizando ejercicios de respiración, aliviando la carga laboral o acudiendo a un especialista que te dé las herramientas necesarias para lidiar con estos problemas.
Tampoco debes sentirte culpable por lo que sientes o por no tener ánimo sexual en todo momento. Muchas veces una percepción negativa de ti mismo termina por afectar el rendimiento sexual, lo cual perjudica más la situación.
El autoconocimiento es importante, saber identificar las emociones que sientes, sean miedos, inseguridades o vergüenzas, te ayudará a gestionarlas de la forma correcta para que no aparezcan durante el acto sexual y en tu vida en general.
Debes estimular la inteligencia emocional, ya sea asistiendo a terapia o leyendo libros, de esta manera, podrás desarrollar una vida más saludable y afrontarás mejor las cargas emocionales.