La gestión correcta del ‘yo interior’ ayuda mucho a tener bienestar y a sentirse mejor con uno mismo, pero para lograrlo, hay que aplicar los métodos precisos que contribuyan a hacer esa introspección de la manera más efectiva, entre los que destaca la neuroatención. Descubramos de qué se trata, para que comiences a aplicar esto en tu vida.
Sentirse feliz y a gusto con uno mismo debe ser la meta primordial de toda persona y algo que debería ser parte del ámbito cotidiano de cada persona. Desafortunadamente, el acelerado ritmo del mundo moderno, la sobrecarga de trabajo y las preocupaciones del día a día, evitan lograr ese objetivo esencial.
Pero siempre hay soluciones a los problemas y maneras de alcanzar ese equilibrio interno que ayude, sin dejar a un lado las responsabilidades cotidianas, a prestar más atención al ‘yo interior’, para sentirse pleno y feliz.
Hay métodos y técnicas que todos pueden aplicar muy fácilmente para alcanzar esa paz interior y esa seguridad interna que ayudan a desarrollar una vida mejor. Entre ellos ha tomado especial relevancia la neuroatención, gracias a las investigaciones que en ese campo ha realizado Sergio Morillo y que ha compilado en un extraordinario libro que te ayudará a afinar tus capacidades interiores.
El texto en cuestión se llama ‘Neurociencia: Desarrolla la atención de un lince y toma mejores decisiones’, un libro donde el autor explica cómo aplicando un sencillo proceso de seis pasos, puedes sacarle el máximo provecho a tu mente, e incrementar tus habilidades de percepción y atención en función de tu bienestar personal.
Es más que un libro de autoayuda, es una guía muy práctica y útil con la que puedes aprender las técnicas que debes utilizar para llegar a los máximos niveles de atención y desarrollo de la memoria, a la vez que incrementas la velocidad de respuesta psicomotora y aumentas las funciones cognitivas.
¿Qué es la neuroatención?
Como su nombre indica, este método especial que recomienda y desarrolla Sergio Morillo, se basa en el estudio y perfeccionamiento de la atención y sobre cómo retener toda esa información, que en el moderno mundo de la inmediatez, se olvida.
Con la aplicación de sencillos ejercicios cognitivos se puede lograr el desarrollo pleno de la atención y las capacidades que ello implica para el bienestar de las personas. Al tener mayor retención de información y al lograr gestionarla de forma ordenada y precisa, se contribuye a tener un mejor control interno, y mayor tranquilidad y paz, que al final es lo que se busca.
Seis sencillos pasos
Según explica Sergio Morillo en su libro, la neuroatención se puede desarrollar siguiendo seis sencillos pasos, que a continuación se mencionan:
- Sincronización: consiste en el establecimiento de objetivos y tareas que ayuden a mejorar el estilo de vida.
- Visualización: trata de la conexión entre el estado deseado y el plan de acción, a través de la creación de un compromiso con los propios valores.
- Detección: etapa en la que se debe detectar y prescribir la fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas, para hacer los cambios que se requieran en función del diagnóstico obtenido.
- Reforzar: todo lo aprendido durante el proceso de adecuación para un nuevo estilo de vida, debe fortalecerse con la práctica constante y consciente de los ejercicios establecidos para tales fines.
- Recalibración: durante el proceso, seguramente surgirán algunos aspectos que llevarán a reajustar las técnicas aplicadas, siempre teniendo como foco los objetivos a largo plazo, sumando todos los recursos aprendidos durante las etapas anteriores.
- Consolidación: es llegar a la meta, saber que se ha aplicado el método a la perfección y que puedes decir que prestas más atención a todo, y puedes guardarlo y recuperarlo cuando quieras, que tienes una vida más ordenada y te sientes plenamente feliz.
Aprender a aplicar la neuroatención a tu vida es muy fácil, solo necesitas poner de tu parte, decidirte a hacerlo y aprovechar la extraordinaria ayuda que ofrece toda la literatura que hay al respecto. Prueba y empieza a cambiar tu vida para bien, no te arrepentirás.