Cómo ofrecer el mejor cuidado en casa para tus mayores

Ya sea un padre, cónyuge u otro ser querido mayor a quien estés cuidando, ser un cuidador familiar es un trabajo de amor y una gran responsabilidad. Debes contar con las habilidades y recursos necesarios para brindar el mejor tratamiento posible y llevar a cabo una responsabilidad tan significativa.

En este artículo, hablaremos sobre cómo proporcionar un mejor cuidado en casa a tu ser querido mayor, como mantener tu hogar seguro para los ancianos, cómo hablar con un padre envejecido sobre el dinero, cómo mantener a un ser querido socialmente comprometido incluso cuando tienes poco tiempo y más, con útiles consejos de Amazing Home Care

Crea un Hogar Seguro para Ellos

Una de las principales causas de lesiones entre la población mayor son las caídas. Debido a factores como peligros ambientales combinados con un caminar, equilibrio y visión debilitados—problemas que a menudo enfrentan las personas mayores—el hogar es el lugar más común donde ocurren estas caídas.

Las personas mayores que tropiezan y caen pueden sufrir lesiones incapacitantes, como fracturas de cadera, inmovilidad, dependencia e interrupciones en sus actividades regulares. Aquellos que tienen osteopenia u osteoporosis están en mayor riesgo.

Por lo tanto, es crucial mantener tu casa segura y acogedora para los ciudadanos mayores. Un miembro mayor de la familia puede encontrar difícil o peligroso manejar algo que un miembro más joven considera sencillo, por lo que es fundamental evaluar los peligros del hogar desde su perspectiva para tomar medidas preventivas. Algunos elementos clave para garantizar la seguridad en el hogar de las personas mayores son los siguientes:

  • Los baños y aseos sin tratamientos antideslizantes son con frecuencia la causa de incidentes de caídas. La instalación de barras de apoyo, el uso de alfombras antideslizantes, el tratamiento de los suelos del baño y del aseo para evitar resbalones y mantener los suelos secos son consideraciones importantes.
  • Organización de superficies: Guarda los cables y alambres sueltos, asegura las alfombras y moquetas, reduce la cantidad de muebles y decoración extra, y mantén las encimeras ordenadas con solo los elementos necesarios.
  • Manejo de escaleras y entradas: Asegúrate de que las puertas sean lo suficientemente espaciosas y que las escaleras sean manejables para las personas mayores; si es necesario, añade rampas.
  • Iluminación suficiente: Abre las cortinas y añade iluminación en las áreas con poca luz. Las luces activadas por movimiento pueden ser beneficiosas para los mayores que se mueven por la casa.
  • Camas y sillas a alturas cómodas: Las personas mayores no deben usar camas o sillas que sean demasiado altas o demasiado bajas.
  • Zapatos que no ajustan correctamente: Los zapatos incómodos pueden aumentar la probabilidad de que tropiecen o caigan.

Ayuda a los Mayores a Realizarse Exámenes y Chequeos Frecuentes

Mantener la salud de los mayores y prevenir posibles problemas requiere pruebas y exámenes de rutina. Las pruebas de detección ayudan a identificar enfermedades de alto riesgo como el cáncer colorrectal o de mama, así como trastornos crónicos comunes como la diabetes, la hipertensión y el colesterol alto. Los seguimientos son esenciales si la persona mayor tiene una enfermedad crónica para prevenir y reducir el costo y los efectos en la salud de las complicaciones y exacerbaciones.

Las pruebas adicionales cruciales para las personas mayores incluyen exámenes dentales, oculares y de densidad ósea. La salud dental está correlacionada con una mejor nutrición, apetito y salud general. Como mencionamos anteriormente, las pruebas de visión aseguran que los mayores usen las gafas correctas, reduciendo el riesgo de caídas y tropiezos. Para evitar la osteoporosis y las fracturas, especialmente en mujeres, se utilizan las exploraciones de densidad ósea para evaluar la salud ósea.

Motiva a los Mayores a Mantener una Vida Activa

No estás solo si encuentras difícil mantener tu nivel de actividad a medida que pasan los años. La sarcopenia, la pérdida de masa y fuerza muscular relacionada con la edad, comienza a finales de los 30 años y aumenta con el tiempo.

Algunas personas mayores tienen afecciones a largo plazo que afectan sus articulaciones, huesos, corazones o pulmones, como EPOC, artritis o enfermedades cardiovasculares. Estas afecciones restringen su grado y variedad de actividad física. Los eventos agudos, como ser ingresado en el hospital, pueden dificultar aún más el ejercicio regular. Sin embargo, el ejercicio es precisamente lo que contrarresta los efectos de la sarcopenia, la inactividad y las consecuencias asociadas.

Numerosos estudios muestran una conexión entre la actividad física y una reducción en el envejecimiento físico, una mejor gestión de enfermedades crónicas y mejoras en la salud del corazón, la salud mental, el rendimiento cognitivo y el bienestar general. Se recomienda que los mayores realicen entrenamiento de fuerza dos veces por semana, además de participar en ejercicio aeróbico moderado-intenso durante al menos 100 minutos. El ejercicio se trata de consistencia y pequeños pasos al principio. Incluso si nunca has hecho ejercicio antes, puedes comenzar a cualquier edad y desarrollar el hábito.

Esfuérzate por Proporcionarles una Dieta Saludable y Adecuada

A diferencia de las personas más jóvenes, los mayores requieren mayores cantidades de proteínas y nutrientes para enfrentar la pérdida muscular y el metabolismo lento. Sin embargo, la mayoría de los ciudadanos mayores no consumen la cantidad adecuada de proteínas para su edad.

Por cada kilogramo de peso corporal después de los 50 años, una persona necesita alrededor de 1.2 gramos de proteína al día. Para prevenir la pérdida de densidad ósea, también pueden necesitar consumir más calcio y vitamina D. Debido a los efectos secundarios de los medicamentos o las fluctuaciones hormonales, los adultos mayores también pueden tener mala absorción y pérdida de apetito, lo que hace necesario añadir ciertas vitaminas y minerales esenciales.

Proporciona Compañía

Los mayores que tienen familia, amigos y compañía pueden evitar el deterioro mental y combatir los sentimientos de soledad y aislamiento mediante la estimulación cognitiva. Sin renunciar a demasiado tiempo propio, los cuidadores familiares pueden ayudar a sus seres queridos a programar tiempo social de varias maneras.

Habla sobre Asuntos Financieros

A muchas personas les resulta difícil hablar de temas delicados como el dinero y los documentos legales con sus padres mayores. Sin embargo, siempre es preferible abordar estos temas antes que después.

Deberías averiguar qué arreglos legales deben estar en su lugar en caso de que necesiten que manejes sus finanzas o tomes decisiones financieras en su nombre, si requieren apoyo financiero de la familia, y cómo desean utilizar sus ahorros, seguros y otros recursos financieros.

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