Primeros Auxilios Psicológicos: Qué son y cómo se aplican

Definición de Primeros Auxilios Psicológicos

Los primeros Auxilios psicológicos se refieren a la intervención psicológica en el momento de la crisis, entendiéndose como una ayuda breve e inmediata de apoyo y rescate a la persona para poder reestablecer su estabilidad emocional y llevarla a tener un equilibrio personal.

Es importante aplicarlos después del impacto de lo que ha ocurrido y estar al pendiente de la persona aproximadamente unas 72 horas después del hecho traumático.

El objetivo principal de los primeros auxilios psicológicos es reducir el nivel de estrés producido tras el impacto de la noticia o evento traumático. Así como prevenir las secuelas después de un hecho traumático, fomentar la autonomía de las personas afectadas para que éstas puedan volver a tomar decisiones.

La aplicación de los Primeros Auxilios Psicológicos es aportar calma y dar las respuestas saludables para que la persona se sienta cómoda y confiada. Animarla para hablar del suceso sin que haya presión.

Es importante conocer lo que no se debe hacer:

  • No profundizar en lo ocurrido si la persona no se abre.
  • No es un diagnóstico.
  • No es terapia.

Debemos ser honestos y confiables, tratar de que la persona se sienta escuchada y comprendida.

¿Cómo se deben aplicar los primeros auxilios psicológicos?

Éstos se deben dar aportando calma y llevar a la persona a que dé respuestas que lo lleven a un estado de serenidad. Es importante darle la oportunidad de querer hablar o esperar un momento para que se anime a hacerlo. Es acompañarlos y darles la confianza necesaria para que se abran y comuniquen lo que tienen dentro.

Es importante dar énfasis en que esta ayuda pretende evitar el estrés agudo y el post traumático, dándole a la persona las herramientas necesarias para poder lograr la paz y tranquilidad que tenían antes del evento.

Para que esta ayuda sea una buena opción para las personas, es importante utilizar un lenguaje tranquilo, con un tono de voz calmado, que haga sentir a la persona que es importante y que entendemos por lo que está pasando. Así se irán adaptando a la situación que están viviendo.

Hay que entender que podremos encontrarnos con personas que son más difíciles para expresar sus emociones y sentimientos, porque puede ser, que ni ellos mismos sepan qué es lo que les está sucediendo. En este caso la paciencia debe ser muy importante, hacerlo sentir cómodo, confiado y que lo único que se busca es que la persona se sienta con la confianza de abrirse.

Primeros Auxilios psicológicos en el trastorno por estrés agudo

Los trastornos por estrés agudo y por estrés postraumático son una reacción normal a una situación de estrés excepcional cuando nuestras capacidades de afrontamiento se ven superadas por la magnitud del hecho.

Características de un trastorno por estrés agudo

  • Transitorio.
  • Gravedad importante.
  • Respuesta a un estrés excepcional.
  • Remite en horas o días.
  • Acontece durante las primeras seis semanas después del suceso.

La sintomatología del Trastorno por el Estrés Agudo es que se produce un estado de alerta al máximo teniendo como consecuencias irritabilidad, insomnio, ansiedad, hipervigilancia, miedo, etc.

Con el paso del tiempo se tienen pensamientos intrusivos, pesadillas recurrentes, regresión al momento del evento, se evita regresar al lugar donde sucedió el acontecimiento, incapacidad para continuar con la vida habitual, problemas de conducta, paralizarte, dejar de hablar, aislarse, etc.

La mayoría de la población general hemos vivido experiencias traumáticas, su prevalencia varía a lo largo de la vida en diferentes culturas, se puede presentar a cualquier edad y ambos sexos, aunque en mujeres se da más.

La exposición a un hecho traumático puede generar una re experimentación del evento y nos puede llevar a evitar regresar al lugar donde ocurrió el suceso. Ésta situación varía mucho en función del contexto, en general más del 50% de los adultos se recuperan sin secuelas del hecho traumático.  Un 35% podría desarrollar Estrés Postraumático o Crónico.

La forma adecuada para aplicar los Primeros Auxilios Psicológicos, son utilizar un lenguaje pausado con tono suave sin dramatizar, ser empático y respetuoso de lo que la persona está viviendo y sintiendo.

Esto ayudará a las personas a irse adaptando a la situación e ir poco a poco saliendo del caos que han experimentado. Recordando que cada persona reacciona de forma diferentes y que es importante respetar el tiempo que se va a tomar para retomar su estabilidad emocional.

Los primeros auxilios psicológicos en niños

Los Primeros Auxilios Psicológicos sirven para acompañar a los niños a enfrentarse a una situación difícil y extraordinaria, fuera de su vida diaria, el cual llamaremos Incidente Crítico (IC).

Se deben aplicar cuando el suceso sea inesperado y que se encuentren fuera de las vivencias habituales que sufran un cambio pasajero o permanente en las rutinas habituales de un niño y/o generen miedo en él.

Ejemplo: muerte o separación de uno o ambos padres, de una mascota, desastre natural, etc. Éstos Primeros Auxilios deben aplicarse inmediatamente después del suceso.

Cómo se deben aplicar en niños

Contener. Evitar separarse del niño, tomarlo de las manos, darle su espacio para que llore y evitar que se descontrole.

Calmar. Ayuda al niño a relajarse, tratar que el niño se sienta comprendido, amado, apoyado, que no se sienta sólo. Provocar que libere su energía nerviosa. Si el niño es mayor de 2 años, tratar de ponerle nombre a sus emociones.

Informar. Explicarle al niño en su lenguaje qué es lo que ha sucedido en la situación actual que está viviendo. Usar frases cortas y tratar de llevarlo a su realidad actual. Hazle saber que lo entiendes y lo apoyas.

Normalizar. Establecer una rutina para llevarlo a dormir como contarle un cuento, cantarle, besarlo al dormir. No obligarlo a comer si no quiere. Establecer límites en las rabietas.

Consolar. Realizar actividades positivas con el niño, escúchalo. Permítele que el niño tenga control sobre cosas pequeñas como decidir qué quiere jugar, para aumentar su seguridad. Ayúdalo a expresar sus sentimientos jugando o dibujando.

Las reacciones que podemos esperar con los niños son:

  • Problemas al dormir o pesadillas.
  • No querer separarse de la persona que lo cuida.
  • Problemas de alimentación.
  • Jugar de forma violenta.
  • Llorar mucho.
  • Rabietas y mal humor.
  • Retroceso en los aprendizajes.
  • Aumento de los miedos.
  • Lenguaje violento.
  • Aparentar no tener ningún sentimiento.

Un llanto continuo e inconsolable una vez satisfechas sus necesidades básicas, suelen ser una señal de alerta.

Es importante recordar que cada persona es diferente, se muestran asustadas y esto crea una situación estresante para las familias.

Los primeros auxilios psicológicos ayudan a prevenir problemas en la salud mental a corto y largo plazo como consecuencia de acontecimientos lamentables y potencialmente traumáticos, promoviendo la recuperación con una intervención apropiada y oportuna.

Hedda María Luisa Álvarez
Psicóloga dedicada al análisis de la conducta.