Hoy en día, la tecnología permite entrar al mundo del entretenimiento desde el hogar. Se puede acceder a un montón de actividades y divertirse de muchas maneras.
Una de ellas es jugar al póker, un juego clásico de cartas. Te contaremos cómo jugar poker, en caso que seas un novato y quieras probar, pero también algunos consejos y secretos para jugadores con más experiencia.
Momentos claves en la popularidad del póker
El póker es un juego clásico de cartas, que tenía su número de jugadores regulares. Sin embargo, hubo un boom de popularidad cuando se comenzó a transmitir por la televisión. El año 2004 fue clave: en el evento principal de la World Series of Póker (WSOP), considerado el torneo más prestigioso, Chris Moneymaker se coronó campeón.
Se trataba de completo amateur, que decidió probar su suerte en el torneo más grande del mundo y terminó venciendo a los jugadores profesionales. Debido a su éxito, muchas personas comunes vieron que era posible jugar y tener buenos resultados en el póker, a pesar de no ser expertos.
Luego, con la llegada de la tecnología, se dio un nuevo salto en popularidad, debido a la comodidad que brinda el mundo digital y la facilidad para acceder al póker y otros juegos en general. Se crearon plataformas para jugar al póker, y también aparecieron los casinos online.
¿Cómo se juega al póker?
El póker se juega con una baraja de 52 cartas, que se dividen en cuatro palos. Dos de color negro, picas y tréboles, y dos de color rojo, corazones y diamantes. Hay números, del 2 al 10 y figuras, que son la J-Q-K y el As.
Existen distintas variantes de póker, pero la más común se conoce como Texas Hold’em. Cadajugador recibe dos cartas ocultas, que solo el puede ver, y debe armar una mano con cinco cartas boca arriba en la mesa. Lo primero que hay que saber es el valor de las combinaciones que se pueden formar:
● Escalera real: del 10 al As del mismo palo.
● Escalera de color: cinco cartas consecutivas del mismo palo
● Póker: cuatro cartas iguales
● Full House: combinación de un trío y un par.
● Color o flush: cinco cartas del mismo palo.
● Escalera: cinco cartas consecutivas de cualquier palo.
● Trío: tres cartas iguales
● Doble par
● Par
● Carta alta
En el Hold’em, la acción se divide en distintas etapas, en las cuales se puede apostar. La primera se llama preflop, es cuando se reparten las dos cartas ocultas a cada jugador. Luego, se muestran las tres primeras cartas sobre la mesa, llamado flop. El turn es cuando se coloca la cuarta carta y el river, la quinta y última.
Durante cada etapa, el jugador se puede retirar de la mano. Aquellos que lleguen hasta el final, deberán mostrar su combinación y el que tenga la más alta, será el ganador.
Consejos a tener en cuenta al jugar al póker
A continuación, presentaremos algunos tipos y consejos que te ayudarán a jugar al póker
1. Si bien el póker tiene una cuota de azar, se trata de un juego muy estratégico, en el cual las decisiones de cada jugar son muy importantes. No siempre gana el que mejores cartas tiene, sino el que sabe manejar la situación. Por ello, resulta clave estar lucido y tranquilo.
En caso de sentirse estresado o enojado, hay que tomarse un descanso y tomar medidas para recuperar la calma. Desde meditar, enfocarse en la respiración, tomar un refresco, cualquier actividad que permite liberar el estrés en la mente y enfocarse nuevamente en el juego.
2. El póker es un juego y debe tomarse como tal. No es recomendable pasar largas horas jugando, sino enfocarse en las responsabilidades diarias que se tengan. Luego, durante los tiempos libres, se puede aprovechar para jugar este divertido juego.
3. La práctica hace al maestro. Este es un dicho muy cierto en la vida, no solo en el póker. Es importante empezar de a poco e ir mejorando, a medida que se juega. Lanzarse a jugar con jugadores de experiencia o con límites altos desde el principio será sinónimo de derrota. Incluso se puede aprovechar la práctica gratis que ofrecen muchas plataformas, para ir conociendo más del juego.
4. Uno de los elementos claves si se quiere jugar al póker es manejar el balance y los saldos. Obviamente nunca hay que jugar dinero que no se tenga en el momento, ni tampoco utilizar fondos destinados a otras responsabilidades. Aquel monto que se puede destinar al juego, también hay que saber manejarlo.
Pongamos un ejemplo, si una persona tiene $30 para jugar, nunca debe ingresar a un torneo que tenga una entrada de $30, ni tampoco sentarse en una mesa de póker con los $30. En cualquiera de ambos casos, si tiene mala fortuna y pierde, se quedará sin nada y deberá poner más dinero de su bolsillo para seguir jugando. Esto puede terminar siendo muy peligroso.